Dormir bien: la clave para prevenir prediabetes y obesidad

Muchas veces se habla de dieta y ejercicio como los pilares para cuidar la salud, pero hay un tercer factor igual de importante que suele olvidarse: el sueño. Dormir bien no solo nos da energía, también protege al cuerpo de desarrollar prediabetes y obesidad.
El sueño y el control de la glucosa
Mientras dormimos, el cuerpo realiza procesos esenciales para regular la glucosa:
- En el sueño profundo aumenta la sensibilidad a la insulina, lo que facilita que la glucosa entre en las células y baje en sangre.
- Dormir poco o mal genera resistencia a la insulina, haciendo que el azúcar se acumule en la sangre y acercando el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.
Hormonas que controlan el hambre
El sueño también regula las hormonas que influyen en cuánto y qué comemos:
- Grelina (hormona del hambre): sube cuando dormimos poco, aumentando el apetito.
- Leptina (hormona de la saciedad): baja con la falta de sueño, haciendo que nunca nos sintamos satisfechos.
Resultado: más antojos de carbohidratos y comida ultraprocesada, lo que facilita el aumento de peso.
Menor gasto de energía
Cuando estamos cansados por no dormir bien:
- El metabolismo se vuelve más lento, quemamos menos calorías en reposo.
- Tenemos menos motivación para movernos o ejercitarnos, lo que reduce aún más el gasto energético.
Estrés, inflamación y grasa abdominal
La falta de sueño aumenta el cortisol, la hormona del estrés. Esto provoca:
- Mayor almacenamiento de grasa, sobre todo en la zona abdominal.
- Aumento de la inflamación, que empeora la resistencia a la insulina y favorece la obesidad.
Consejos prácticos para dormir mejor
- Mantén un horario regular de sueño (acuéstate y despiértate a la misma hora).
- Evita pantallas brillantes 1 hora antes de dormir.
- Cena ligero y al menos 2–3 horas antes de acostarte.
- Haz ejercicio durante el día, pero no justo antes de dormir.
- Mantén tu habitación fresca, oscura y silenciosa.
Conclusión
Dormir bien no es un lujo: es un pilar fundamental de la salud. Si tienes riesgo de prediabetes o obesidad, cuidar tu sueño puede marcar la diferencia tanto como lo hacen la alimentación y la actividad física.
👉 Recuerda: un buen descanso de 7 a 9 horas cada noche es medicina preventiva gratuita para tu cuerpo y tu mente.